JOYERÍA con PROPÓSITO

ASÍ EMPEZÓ EL VIAJE

Amalaya nació hace una década como un acto de arte y simbolismo; en ese entonces, no había un plan de negocio, ni una estrategia comercial formal, solo el impulso creativo de dar vida a piezas que tuvieran un sentido, que fueran un amuleto personal que guarda memorias, conexiones, anhelos y fragmentos de historias y personas.

VIVA LA VIDA

Nuestra primera colección, hecha completamente a mano, en pequeños lotes, desde la intuición, la emocionalidad y el corazón.

En ese primer camino, el foco estaba en crear desde lo profundo, sin prisa, sin pretensiones hecho como arte, 100% Mexicano. Pero con el tiempo y con la certeza de que esto merecía llegar a más personas, la visión fue transformándose.

Lo que comenzó en un taller artesanal, y después de una pausa de ocho años, tuvo una transformación clave. Y en el 2022, llegó una nueva visión de crecimiento. Nos reinventaros como marca, abrimos nuestra tienda en línea y dimos el primer paso, hacia una nueva etapa: más estratégica, más visible, más profesional, pero siempre con la misma intención.

Dos años después, en el 2024, abrimos nuestra boutique física en San Pedro Garza García, Nuevo León. Un espacio creado no solo para exhibir joyería, sino para conectar e inspirar.

Hoy, Amalaya no es solo una marca de joyería. Es una manifestación viva de un sueño, que evolucionó sin traicionarse, y ahora honra su origen, con piezas que tienen un simbolismo y brindan un poder especial a quien las porta.

"Amalaya no es solo una joya, es un Talismán, que te elige, te acompaña y te hace ser y sentirte única"